Un verdadero paraíso natural rodea a este lugar idílico. La arquitectura del edificio y el paisaje salvaje hacen de este pequeño hotel un sitio muy peculiar. Las habitaciones tienen suelos de madera y baño privado con azulejos de mosaico, ¡como una obra de arte! Además, hay un amplio salón con chimenea y cocina totalmente equipada. No puedo olvidar mencionar las impresionantes vistas del río y el jardín. Realmente es un lugar para desconectar y disfrutar de la tranquilidad.

Tuberías en el río.

Tuvimos una experiencia maravillosa en Moinho Da Ponte Velha. Nos encantó el diseño moderno y la relación calidad precio era muy buena. La habitación era espaciosa y cómoda, y disfrutamos de la amplitud de las instalaciones comunes como la cocina y la terraza con vistas al río. El personal fue servicial y atento a nuestras necesidades. En general, recomendaría este hotel.

Atención rápida y eficiente en caso de percances. Instalaciones modernas y confortables, incluyendo cocina completa y amplia sala de estar con chimenea. Diseño atractivo en construcción junto al río. Habitación cómoda y baño espacioso y limpio. Recomendable para excursiones por la zona.

Qué vacaciones más increíbles! La casa era lo más, con una terraza con vistas al río que era puro fuego. Además, las zonas comunes eran súper acogedoras, especialmente la cocina y el salón. Y no puedo olvidar mencionar lo amable que fue todo el personal, siempre dándonos buenos consejos y recomendaciones.

Si hubiera algo que podría mejorar, sería la oferta de actividades para gente joven como nosotros. Está genial que haya tranquilidad y naturaleza, pero nos habría gustado tener opciones de fiesta o lugares de ocio nocturno cerca.

nuestra estancia en Moinho Da Ponte Velha en Bragança fue simplemente maravillosa. El entorno junto al río creó una atmósfera de paz y tranquilidad. La habitación era amplia, confortable y acogedora, con unas vistas impresionantes. El desayuno, con deliciosas mermeladas caseras, fue abundante y de calidad. Destacamos especialmente la amabilidad y disposición del personal, que nos hizo sentir como en casa.

el acceso al hotel puede ser un poco complicado debido a un tramo corto de camino no asfaltado.

Arquitectura única: El edificio del hotel es simplemente impresionante, con sus suelos de madera y baños privados decorados con mosaicos. Te transporta a otra época y te hace sentir como si estuvieras en un castillo de cuento de hadas.

Acceso complicado: El acceso al Molino puede ser un poco complicado, especialmente si sigues las indicaciones del navegador. Asegúrate de prestar atención a las señales y no te desanimes, porque definitivamente vale la pena llegar allí.

Increíble! El lugar es simplemente impresionante, al lado del río y la casa es un antiguo molino de agua restaurado que es moderno y súper cómodo. La cocina está totalmente equipada para cocinar tus propias comidas y la sala de estar es enorme con una acogedora chimenea, sofás y una mesa. Las habitaciones son espaciosas y bien decoradas, con baños grandes y limpios. El desayuno es único, con mermeladas caseras deliciosas. Además, el personal es extremadamente amable y siempre dispuesto a ayudar. Definitivamente volvería a este lugar para disfrutar de un entorno tranquilo junto al río.

La mejor experiencia! Visitamos el centro histórico de Bragança, con su castillo imponente y su hermosa arquitectura. nos aventuramos a explorar el Parque Natural de Montesinho, donde hicimos una caminata emocionante y disfrutamos de vistas impresionantes. Sin duda, una escapada perfecta para jóvenes aventureros como nosotros.

Lo único que nos faltó fue una sala de juegos o una discoteca en el hotel para poder seguir divirtiéndonos durante la noche. Pero, aparte de eso, no tenemos ninguna queja.

Siempre vuelvo a este hotel. Desde la primera vez que me alojé, el personal me ayudó a encontrar mi horquilla perdida. Este lugar tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratuito en áreas públicas, aparcamiento cercano, hervidor eléctrico, utensilios de cocina, cocina compartida. Regresaré pronto.

Alucinante! El diseño moderno del molino y la excelente relación calidad-precio son increíbles. La ubicación junto al río es simplemente impresionante, y la casa en sí es una verdadera joya. La decoración es fascinante y Elsa, la anfitriona, es encantadora. El desayuno es espectacular, con mermeladas caseras que son una verdadera delicia. Además, la chimenea, el río y la amabilidad de Elsa hacen que la estadía sea perfecta. ¡Todo es perfecto, excepto el acceso! Deberían arreglar el camino después de las lluvias recientes. En resumen, no necesitas ir al médico para relajarte: basta con alojarte en este lugar maravilloso.

Nos alojamos en el encantador Moinho Da Ponte Velha Hostal, un lugar apartado al final de una empinada cuesta que te sumerge en la belleza de la naturaleza. El entorno junto al río y rodeado de vegetación era simplemente impresionante. Las habitaciones eran amplias y muy limpias, con una decoración rústica que nos encantó. Además, el desayuno fue magnífico, con deliciosas mermeladas caseras. Realmente disfrutamos de nuestra estancia en este lugar tranquilo y hermoso.

No 👎.

La ubicación del hotel es perfecta, alejada del bullicio de la ciudad y rodeada de naturaleza. El entorno al lado del río es realmente tranquilo y bonito. Además, las habitaciones son amplias y muy limpias, con una decoración exquisita. Otro punto a favor es el delicioso desayuno, con mermeladas caseras que son una delicia.

El acceso al hotel puede ser complicado, ya que se encuentra al final de un camino escarpado de tierra. el aparcamiento es pequeño, lo que puede resultar incómodo si viajas en coche.

La atención en Moinho Da Ponte Velha Hostal fue impecable. La casa estaba en perfecto estado y nos ofrecieron la opción de utilizar la cocina para una cena rápida. Además, el personal fue muy amable y eficiente al solucionar un problema con la luz en tan solo 10 minutos. La habitación era cómoda y nos encantó la ubicación junto al río. La tranquilidad y el exquisito gusto en la rehabilitación del viejo molino fueron detalles que apreciamos. disfrutamos de la terraza para desayunar y del trato amable del personal.

No hay nada que no me haya gustado 😊.

Nos alojamos en un lugar encantador con habitaciones espaciosas y bonitas. El trato recibido fue estupendo, y la localización era preciosa, con vistas al río. Además, el desayuno era abundante y delicioso, con opciones tanto dulces como saladas y yogures. También había facilidades como cocina y terraza para disfrutar. Recomendable para familias con niños, parejas o amigos que busquen un lugar tranquilo y cómodo.

Nos sorprendió el acceso al principio, ya que había un tramo corto de camino de tierra un poco empinado.